Cirugía cardiaca y comunicación: testimonio de la Dra. Centella

 “Creo mucho en la psicología del paciente y creo mucho en la influencia que tiene su vida personal en su patología, incluso del corazón. Me interesa saber lo que le pasa al paciente, cuál es su entorno, si tiene alguien que le apoye, y no es cotilleo,  simplemente quiero saber si tiene a alguien que le coja la mano por la noche, algo fundamental. Tiene mucho que ver con la patología que estamos tratando a todos los niveles”.La Dra. Tomasa Centella es cirujana cardiaca del Hospital Ramón y Cajal de Madrid. Desde pequeña quiso ser “cirujana del corazón” pero al terminar la carrera, y por falta de plazas, tuvo que optar a otra especialidad, la de medicina del trabajo y ejercer en otros ámbitos, cómo ser parte del primer equipo que se formó para los helicópteros de emergencias de tráfico del entonces 061 (actualmente 112) en Madrid. No obstante,  finalmente lo consiguió, y desde hace unos años su vida es el corazón. Sigue leyendo

Cómo es el Infarto de miocardio: Testimonio de Juan

“Tras el infarto lo primero que piensas es que serás una persona inválida para toda la vida, pero más tarde te das cuenta de que haciendo todo lo que los cardiólogos te aconsejan es totalmente distinto” Hace ya 29 años que Juan sufrió un Infarto de miocardio, desde entonces, ha pasado quince veces por el quirófano para solucionar diferentes cardiopatías pero dice sufrir más por los amigos y familiares que ya no están y por los problemas del día a día  que por los suyos propios.

“Teníamos un taller de confección en el que hacíamos uniformidades y donde me ayudaba mi señora. Yo vivía bien, fumaba (no mucho, una cajetilla a la semana), tomaba una copita de vez en cuando, no me preocupaba de hacer ejercicio ni nada por el estilo… tenía una vida más o menos sedentaria. Pero además, tenía la muy fea costumbre de fumar un cigarrillo en la cama pese a que mi mujer me había pedido reiteradas veces que lo dejara. Y entonces, en el año 83, de vacaciones en Roquetas de Mar, estábamos bailando en un hotel y de repente sentí dolor en los brazos, sudoración y me puse mal. Nos fuimos a la casa de mis hermanos donde estábamos hospedados y pase la noche”. Sigue leyendo